Berenjenas rebozadas... de mi madre

Recuerdos... Comerlas tal como las hacía. Mi madre protegiendo el plato, para que llegase algo para la cena, porque con cuatro niños probándolas!. Muerdes, casi quemándote, y la masa cruje mientras la berenjena, dentro, se ha hecho cremosa, entre frita y al vapor. No puedes parar...

ingredientes:
berenjena, una grande o dos medianas
150 gr. de harina
150 ml. de agua, aprox.
un chorrito de aceite
1 huevo
sal
aceite para freir

Cortamos la berenjena en rodajas de 1cm. aprox. Ponemos en un cuenco con agua y un poco de sal. Dejamos remojar mientras preparamos el rebozado (para que esten más suaves), aunque no es imprescindible si la berenjana no está fuerte.

Separamos clara de yema. Montamos clara a punto de nieve blanda. Batimos la yema. Ponemos la harina en un cuenco, la sal y el agua hasta formar una masa líquida pero espesa. Añadimos la yema e integramos. Por último, añadimos la clara con movimientos envolventes. Debe quedar como una masa de tortitas, y espumosa.

Enjuagamos y escurrimos bien la berenjena. La secamos con papel de cocina. Rebozamos y freimos en aceite de girasol o de oliva suave, en tandas pequeñas. Sacamos a un plato, sin amontonar, para que escurran el aceite y se conserven crujientes.

Se pueden servir con mayonesa o con salsa de soja o con miel (entonces se pueden contar en bastoncitos).

También son estupendas (mmmmm) las alcachofas rebozadas.